lunes, 15 de febrero de 2010
¿Si el encanto se acaba, puede aparecer dónde no estaba?
Si no nos gusta nadie, y uno le da la oportunidad a alguien que quiere estar con nosotros, ¿cómo no llegar a querer a ese alguien que da todo por uno, que nos trata como reinas, que se la juega día a día por ganarse nuestro amor?. Antes pensaba que la forma indicada de estar con alguien era que nos cautivara desde el principio, pero ¿quién dice lo que es o no indicado? Además esa magia que nos emociona, que nos hace suspirar, que nos hace flotar, que nos hace felices y hace que alguien nos guste locamente puede aparecer donde no estaba. La convivencia puede hacer florecer el amor, quizás el darnos cuenta de la dedicación, la preocupación y el cariño que nos da alguien, puede hacer que valoremos a esa persona y comenzar a interesarnos. O simplemente a medida que uno lo va conociendo se puede ir maravillando con ese alguien, hasta verlo de una manera especial y llegar a amarlo totalmente.
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