El problema con la gente es que cree saber TODO del resto cuando no saben nada; no se dan cuenta que solo saben lo que uno quiere que sepan y lo que alcanzan a ver de nosotros. De cualquier manera eso no es todo, nunca será todo, porque en nuestro interior hay mucho más que eso... de hecho ni nosotros mismos sabemos de las todo lo que somos capaces, cosas que llegaremos a pensar o hacer, pues salen a la luz de la nada, en circunstancias especiales, sorprendiendo incluso a nuestros más cercanos. Entonces si poco me conoces... ¿quién eres tú para hablar así de mi?¿quién eres tú para decirme lo que debo hacer? ¿por qué crees saber más sobre mi que yo misma? La verdad pocas personas tienen la capacidad de llegar rápidamente a lo más profundo de nuestra alma y saber cómo realmente somos, la mayoría cree dominar a la perfección nuestras vidas y personalidad pero se equivocan...
Nadie nos da el derecho para hablar con completa seguridad de los otros, pero todos lo hacemos. Él es tonto, ella es tímida, él es nerd, ella es fácil, etc, Todos nos formamos imágenes de las personas porque así distinguimos, clasificamos, catalogamos, analizamos y eso no es malo, es simplemente la forma de conocer que tenemos los seres humanos. El error está en juzgar, en pecar de sobervios sobre la forma de ser de la personas y quedarse solo con lo superficial de ellas. Sin tomarse el tiempo de saber que hay más allá de las apariencias, que a veces engañan o son una fiel imágen de la realidad.
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