Todos hemos mentido alguna vez, por lo menos, mentiras blancas o inocentes. Y creo que algunas veces es justificado cometer esta acción, pero no por eso se debe abusar.
Vivir una vida a base de mentiras
Hace olvidar qué es lo verdadero en uno, no se puede construir nada bueno con puras mentiras, porque si es bueno no hay necesidad de mentir prolongadamente. Además ¿cómo creerle a un deshonesto? ¿cómo saber si dice la verdad? ¿cómo sabe él o ella quién es realmente? a un mentiroso se le vuelve una costumbre o hábito mentir, y en un momento pierde la noción de que se va convirtiendo en una persona falsa y hasta un desconocido para sus cercanos. Decirse a si mismo que uno se ve en la obligación de mentir, para aliviar la culpa es una escusa sin sentido porque es más trágico para el engañado descubrir que todo es una mentira tramada por alguien de nuestra confianza, que tiene nuestro aprecio, etc. Pero hay quienes contraargumentan esto con "pero si nunca se va a enterar, da lo mismo" uno nunca sabe si el engañado sabrá que juega ese rol, pero uno si sabe que le mintió ¿cómo no sentirse mal por eso? ¿cómo no sentir un mínimo cargo de conciencia? ¿cómo sentirse bien sabiendo que hay otros viviendo engañados por nosotros?
Como mencioné anteriormente hay mentiras pequeñas que no afectan mayormente a nadie, pero de todas maneras eso no nos convierte en seres sinceros. Por eso yo, prefiero omitir más que mentir. Creo que he mentido poco en mi vida y en nada grave =D
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